Uno de los inconvenientes más comunes que sufren a menudo las personas que practican ciclismo son los pinchazos en las ruedas, y en nuestro taller de bicicletas en León somos conscientes. Por ello, utilizar un método antipinchazos en tu bicicleta de montaña es vital para evitar estos infortunios.

La opción más económica es la cámara antipinchazos, cuyo precio ronda los 7 euros y solo tiene que introducirse en la rueda del vehículo como una cámara corriente. Se caracteriza por contener un líquido especial que en caso de rotura sella el orificio rápidamente.

Otra elección que te proponemos desde el taller de bicicletas en León son las ruedas tubeless, es decir, la cubierta sin cámara interior. Funcionan de forma similar a las cámaras antipinchazos, empleando un líquido sellador, pero son mucho más efectivas, ligeras, resistentes y complican considerablemente que se produzca un reventón. No obstante, su coste es mucho más elevado.

Las bandas antipinchazo también son una práctica alternativa. Se adaptan internamente a la rueda. Además, si las combinas con las cámaras antipinchazos sufrir un percance con algún objeto punzante será difícil.

Dependiendo del uso que des a tu bicicleta (las rutas por parajes rurales son más peligrosas que las urbanas) y el dinero que estés dispuesto a desembolsar, deberás declinarte por una u otra opción. Sin embargo, debes tener muy en cuenta que cualquier método perderá precisión si los neumáticos carecen de la presión de aire necesaria o simplemente están muy gastados.

En cualquier caso, si estas técnicas no evitan que sufras un pinchazo o rotura, en Bicicletas Blanco contamos con un servicio de reparación altamente cualificado. Acércate a nuestro taller sin compromiso. Te esperamos.